Gran Bazar Maracaibo es un “gigante” comercial que quiere despertar
Cuando a Jesús Hierro le preguntan cuándo arrancó el centro comercial Gran Bazar, asegura con firmeza “aún no arranca”. La afirmación se sustenta en que, luego de nueve años en funcionamiento, el 55 por ciento de los locales no está operativo, porque los propietarios jamás ocuparon los espacios.
Hierro es el presidente de la junta de Condominio del Gran Bazar. “Este es el centro comercial más grande de Venezuela”, expresa con orgullo y explica que su magnificencia radica en la cantidad de unidades comerciales que posee: dos mil 870 locales en total. “No hay otro igual”.
Sin embargo, solo 750 locales están operativos y de esos, un 28 por ciento paga condominio. El resto de los puestos comerciales, ocupados o no, están morosos; incluso hay propietarios que jamás pagaron sus cuotas, a pesar de que firmaron “estar de acuerdo” cuando les entregaron sus plazas.
La situación que mueve la inquietud de Hierro es sencilla. Si los propietarios no pagan no hay dinero para invertir en el mantenimiento y mejoramiento del centro comercial. A la larga, será insostenible preservar las áreas del deterioro y todos, los que pagan y los morosos, se verán afectados.
“Queremos lavarle la cara a Gran Bazar”, asegura el comerciante. Ya comenzaron con la limpieza, iluminación, reforzamiento de la seguridad, adecuación de salas sanitarias y otras mejoras importantes. “Nuestro fin es que la gente compruebe que este es un centro comercial seguro y agradable para visitar”.
Gran Bazar: un gigante en tres etapas
“El error que cometió la constructora fue construir y entregar el centro comercial por etapas”, asegura Hierro y relata que, la tercera y última área, que es la más grande y con los locales más amplios y llamativos, nunca fue ocupada.
Esos locales estaban abandonados, oscuros, llenos de murciélagos y basura. Pero la actual junta de Condominio se encargó de recuperar los espacios y con la pulitura de los pisos que se realizará el próximo fin de semana, quedarán listos para ser ocupados. Un gran logro luego de cinco años de abandono.
Es oportuno destacar que la junta que preside Hierro tiene apenas 14 meses de labores. “Antes se cometieron muchos errores, se le permitió a los propietarios que no pagaran sus cuotas y lo poco que se recaudaba no se empleó en lo primordial”, comenta Hierro.
Anteriormente el condominio era manejado por la misma constructora a cargo del proyecto: Constructora Banin del Grupo Fernández. “No es igual que el condominio lo manejemos por propietarios, que estamos acá y sabemos lo que el centro comercial necesita”.
Una leyenda en el corazón de Maracaibo
En 2009, cuando Gran Bazar inició operaciones, algunos vieron con escepticismo que un centro comercial tan grande tuviera éxito en una zona comercial popular como lo es el casco central de Maracaibo. De hecho, la ocupación fue lenta y progresiva.
Hoy, unas cuatro mil personas visitan Gran Bazar cada día. Es impresionante ver las áreas colmadas de compradores, quienes buscan los rubros que dentro del centro comercial se consolidaron: dos bancos, reparación y venta de accesorios para celulares, manicuristas, estilismo de cejas, venta de artículos de higiene y cosméticos, perfumería, ropa, juguetes, comida, cafés, barberías y hasta sex shop hay en las instalaciones.
El centro comercial posee un estacionamiento interno con puesto para tres mil vehículos. “Es totalmente seguro, porque contratamos una compañía de vigilancia solo para esa área”, detalla Hierro y añade que el parqueo tiene dos accesos al área comercial, uno a la primera etapa y otro a la tercera que pronto será aperturada.
Además, Gran Bazar ofrece ambiente refrigerado, siempre y cuando las fluctuaciones eléctricas lo permitan; escaleras eléctricas y ascensores. “Todo está operativo. Tenemos tres plantas de autogeneración: una en funcionamiento, una que se dañó y estamos reuniendo los recursos para repararla, y la otra está nueva y esperamos que la constructora nos la entregue”.
La constructora no culminó la entrega
En el esfuerzo por “lavarle la cara” al centro comercial y ofrecer reivindicaciones, antes de exigir el cumplimiento de los deberes, la junta de Condominio se encargó de adecuar los espacios que no han sido ocupados, para que los dueños se muden de inmediato.
“Estos propietarios firmaron estar de acuerdo al recibir los locales y con eso, automáticamente se comprometieron a pagar el condominio. Ese compromiso se mantiene, estén o no dentro del centro comercial”, afirma Hierro.
También está un pequeño grupo de propietarios que no firmó. “Ellos deben de sincerar su estatus, para que finalmente la constructora culmine con la entrega de Gran Bazar y todos los espacios estén operativos. Que alquilen o que vendan, pero que hagan algo con sus locales”.
Mano dura contra los morosos
La junta de Condominio de Gran Bazar, que está integrada por 10 miembros, acordó iniciar en septiembre 2018 un proceso judicial de embargo contra quienes se niegan a pagar las cuotas atrasadas.
“Abriremos un proceso de sanciones judiciales para los morosos. Contemplamos multas del 100 por ciento de la deuda para el primer mes y este monto irá creciendo exponencialmente a medida que transcurran los meses y el propietario no pague”, puntualizó Hierro.
También se multará a los dueños de locales anclas que están desocupados. “La idea es que todo el centro comercial cobre vida, que la gente siga viniendo, que vea que tenemos cosas que ofrecer. Nosotros apostamos a quedarnos aquí y a seguir creciendo, pero para eso necesitamos que todos los propietarios pongan su cuota de esfuerzo”. Al final, si todos reman en la misma dirección es más fácil llegar a buen puerto.
Contactos:
Oficina de Condominio: 0424-635.1631
Redacción: Reyna Carreño Miranda
Fotografías: Cortesía
