Fiesta de revelación de sexo, una moda que une familias más allá de las fronteras
María Virginia y David celebraron la revelación del sexo de su primogénito. Una fiesta donde se reunieron con sus familiares y amigos para festejar, no solo que van a ser padres, sino que su bebé es niña.
Al principio, a la pareja le pareció una extravagancia “hacer un gasto” para develar un detalle que antes pasaba desapercibido. Pero una sobrina, que tiene un año viviendo en Chile, los convenció con un argumento válido.
“La mayor parte de la familia está viviendo en otro país, así que la celebración será una buena excusa para reunir a quienes están en Maracaibo y ponernos en contacto con los que están afuera”, les comentó.
Los futuros padres vieron una luz en la fiesta de revelación de sexo. Su futuro hijo sería el centro de una unión familiar sin fronteras. Así que comenzaron los preparativos para festejar en la medida de sus posibilidades, pero sin escatimar en detalles hermosos.
Una sorpresa para los padres
El primer paso fue realizar el ecograma para saber el sexo del bebé. “Tengo cinco meses de embarazo. Antes me hice un estudio, pero el médico no pudo ver el sexo del bebé, así que este era la definitiva”, comenta María Virginia.
Cuando la pareja le comentó al doctor que no querían saber si el bebé era niño o niña, el especialista se extrañó. “Nos dijo que éramos los primeros pacientes que no estábamos ansiosos por saberlo, pero nosotros le explicamos nuestro plan”, admite David.
Así que le pidieron al médico que les entregara los resultados en un sobre sellado y lo llevaron a una tienda de arreglos para fiesta. “David estuvo a punto de abrirlo, pero luego le pareció emocionante y hasta divertido mantener la incertidumbre hasta la celebración”, reconoce la futura madre.
Ordenaron un globo oscuro y gigante, con un hermoso arreglo de cintas, cuyo contenido serían papelillo dorado y otros globos pequeños con el color que indicara el sexo del bebé: rosado para niña o azul para niño.
La emoción que se contagia
Las tías del nuevo bebé se contagiaron con la celebración. Organizaron una especie de quiniela y se ingeniaron originales maneras para apostar y manifestar su preferencia entre niño o niña.
“Una hermana de David mandó a hacer la torta y dentro, el bizcocho con el color rosado, porque para ella nuestro bebé es niña. Por el contrario, mi hermana encargó unas galletas azules, para mostrar que ella prefiere un varoncito”, relata María Virginia con alegría.
El día de la fiesta, los parientes y amigos de la pareja se reunieron, brindaron y compartieron en honor a la pareja y de su primogénito. Llevaron una pizarra decorada y cada uno anotó su nombre en un lado con color azul y en el otro con tiza rosada.
Al final, María Virginia y David se colocaron bajo el globo con un par de alfileres y a la cuenta de tres pincharon la esfera que explotó entre gritos y aplausos, para dejar salir unos pequeños globitos rosados.
Durante toda la celebración, hubo un video chat donde se conectaron los familiares en Chile, Panamá, Ecuador, España y Argentina. La abuela paterna, que está en Boconó, le cantó una canción de cuna a la bebé a través de WhatSapp y todos lloraron de ternura.
Como acto de cierre, se levantaron los vasos con ponche de frutas y la futura madre brindó y pronunció por primera vez el nombre de su hija en voz alta. “Brindo por ti, mi pequeña Virginia Sofía. Papá y yo te amamos y soñamos con verte muy pronto”.
Fiesta de revelación de sexo con creatividad
La fiesta de revelación de sexo, al igual de baby shower, es una celebración anglosajona. Sin embargo, la práctica cobra fuerza en Maracaibo, sobre todo en estos momentos que reunir a la familia es todo un desafío.
La idea es que los futuros papás reúnan a familiares y amigos para revelar si el bebé es niño o niña. Pero el anuncio no consiste simplemente en decirlo, sino hacerlo de la forma más original posible.
Por ejemplo, al cortar la torta, su color interior revela el sexo del bebé, según sea rosa para niña o azul para niño. Existen más ideas y los invitados pueden hacer sus propias apuestas a través de juegos o bien en una lista, o de una forma más creativa.
Las posibilidades para hacer más divertida la fiesta de revelación de sexo son infinitas. Al finalizar el agasajo, los que hayan acertado el sexo del bebé se llevan un souvenir.
Redacción: Reyna Carreño Miranda
Fotografías: Archivo