Con 2500 dólares se puede comprar una casa de cuatro cuartos en Maracaibo
Con 3.000 dólares, equivalentes a 47.500.000 millones de bolívares al cambio en el mercado negro, se puede comprar una vivienda de cuatro habitaciones, patio pequeño, porche, cocina y dos baños en la Urbanización Lago Azul, al sureste de Maracaibo. La cifra la ofrece Nelson Quintero Weffer, presidente de la Cámara Inmobiliaria del Zulia, tras revisar en su teléfono celular un chat con corredores del área.
El ingeniero aclara que el mercado está dolarizado pese a que ley no permite transar en moneda extranjera aunque exista flexibilidad en bienes de segunda mano.
“Con menos, tal vez 2.000 o 2.500 una persona se puede comprar una vivienda en algún sector popular como San Jacinto”, añade Quintero Weffer al referirse al desplome de los precios de los inmuebles en el Zulia por una razón muy sencilla: el aumento de la oferta de bienes por el éxodo masivo de venezolanos. La necesidad de dinero inmediato reduce los montos.
Como ejemplo, Quintero Weffer, recuerda que hace unos cinco años se hablaba de casas o quintas en villas de la zona norte, principalmente de La Virginia, La Lago y Milagro Norte, muy bien cotizadas. “Había negocios por hasta un millón de dólares, ahora, cualquiera puede poner un precio así, depende de las características del inmueble, claro, la cosa es que la vendan”.
La razón es sencilla. En 2012 o 2013 en una villa de 100 casas solo estaban en venta dos y en la actualidad, en promedio, tienen cartel de venta 25. “Mientras más oferta, precios más bajos”, explica. Cuando mucho estima que se logre vender en 250.000 dólares lo que antes se podía vender en un millón.
Quintero Weffer regresa a los datos de su chat. Una vivienda en una villa en Milagro Norte, de unos 300 metros cuadrados, con sus ampliaciones, llegó a estar en 280.000 dólares. “Hoy se transan por 85.000”, refiere.
“El que tiene el dinero en la mano es el que tiene el poder”, afirma el Presidente de la Cámara Inmobiliaria. ¿Y antes no era así? “No”, y lo explica. “Antes el poder lo tenía el vendedor. Había muy poca demanda y las condiciones del país no eran tan inestables”.
El ingeniero recomienda prudencia y calma antes de comprar o vender un inmueble. La inestabilidad de la moneda representa un riesgo que puede llevar a la ruina a los negociantes en momentos en los cuales la divisa da saltos inauditos de manera intempestiva. Vender o comprar puede ser una moneda lanzada al aire.
El metro cuadrado en el Zulia estaría entre 800 y 1000 dólares, pero Quintero Weffer insiste que el desorden con la divisa es tal que el parámetro pasa por debajo de la mesa.
“Recuerdo el caso de un amigo que hoy está radicado en Tampa con su negocio. Vendió un apartamento de unos 30 años en Las Carolinas en 40.000 dólares hasta con el polvo y llegó a pensar que iba a perder. Hoy ese apartamento no llega a 10.000 dólares”.
Raúl Semprún